El final del discurso
Antes de casarme convencí a mi por entonces novio -y ahora marido- para que nos apuntásemos juntos a un curso de cocina. Algo sencillo, que nos salvara de tener que alimentarnos de comida precocinada casi todos los días. El curso fue divertido y aprendimos a perderle el miedo a los fogones. Sin embargo, el consejo [...]