A pesar de que la mayoría de las personas buscan que se les motive desde fuera, la verdadera y poderosa motivación es la que nace de nosotros mismos, es la motivación que nos hace libres y dueños realmente de nuestras vidas.

Las siguientes estrategias nos proporcionan una manera sencilla de despertar en nosotros nuestra motivación,  sin depender de otros.

1. Descubre cuáles son esos momentos del día, esos trabajos y esas personas que hacen que tú fluyas.  Y en base a esa información plantéate como podrías reestructurar tu vida y cómo podrías aumentar el número de momentos óptimos al día y reducir aquellos en los que te sientes desmotivado o distraído.

2. Hazte cada día una pregunta importante y una pregunta sencilla.  La pregunta importante: “¿Por que frase quiero que me recuerden?”  Y la pregunta sencilla: “¿Qué he hecho hoy que ha contribuido a que mejore como persona o como profesional?”

 3. Hazte una vez al mes una evaluación de rendimiento a ti mismo.   Para hacer este ejercicio tienes que ser muy honesto contigo mismo, ya que si pasas por alto los errores sin aprender de ellos, estarás perdiendo el tiempo y no mejorarás tu rendimiento.  Para que esta evaluación de ti mismo sea eficaz, establece metas pequeñas y grandes que puedas evaluar si se van alcanzando; y comprueba que estas metas pequeñas están relacionadas con tu objetivo global.

4. Sube peldaños hacia el dominio de un campo específico para mejorar tu rendimiento. A conseguir esto te ayudará  el esforzarte por llegar un poco más alto cada vez; el buscar el feedback de tus compañeros para que te ayuden a ver en dónde puedes mejorar y el concentrarte en aquellas áreas que tienes de mejorar.

5. Crea tu propio cartel motivador. Sólo tú conoces aquellas imágenes y frases que provocan en ti emociones que te impulsan, que te motivan.

¿Te ha interesado este artículo? Síguenos en Y apúntate a nuestra Newsletter mensual para recibir artículos prácticos para tu desarrollo profesional.

 

Rosa Cañamero
Socia Directora y Coach Ejecutivo